Reseña: Las ventajas de ser invisible de Stephen Chbosky

Título: Las ventajas de ser invisible
Autor: Stephen Chbosky
Editorial: Alfaguara juvenil
Año: 1999
Páginas: 262
ISBN: 9789877382631 

Historias que dejan huella

¡Hola a todos! 

¿Cómo están? ¡Pasó muchísimo tiempo desde la última vez que escribimos en el blog! Muchas cosas en el medio también, pero no vamos a aburrirlos con excusas torpes, sino que mejor volvemos de lleno con ¡una nueva reseña! 

Sinopsis

Charlie es un chico realmente especial: lee muchísimo, no sale con amigos ni con chicas y reflexiona sobre el mundo desde un punto de vista muy particular. Su ingenuidad, su incapacidad para relacionarse normalmente y su extrema sinceridad le crean más de un problema, especialmente ahora que su único amigo ha muerto.

Conocer a Sam y a Patrick, los chicos más excéntricos del instituto, provocará un giro radical en su vida que lo sumergirá de pleno en la adolescencia.

Vivir al margen ofrece una perspectiva única. Pero siempre llega el momento de entrar en escena y ver el mundo desde dentro.

Argumento

Charlie tiene una percepción muy especial del mundo. Toda su vida ha sido muy reflexivo y solitario, contaba con un solo amigo al que le compartía sus pensamientos y con el que pasaba el tiempo, pero luego de su suicidio, Charlie debe enfrentarse a la secundaria por sí solo. Es entonces cuando empieza a escribirle al lector, un desconocido que bajo sus palabras, es una persona que no va a juzgarlo. En sus cartas él no mencionaría nombres reales ni lugares, pero sí le contaría todos los sucesos en su vida de adolescente.

Lo que Charlie necesita es un amigo con quien hablar y descargarse de toda esa ansiedad que su mundo le provoca.

Y los consigue al conocer a Sam y Patrick en un juego de la escuela. De inmediato ellos lo toman como uno más de su grupo, y por primera vez Charlie comienza a dejar ver cómo percibe al mundo, lo que lo vuelve una persona intrigante para un grupo más de marginados.

Opinión

En esta reseña quería contarles sobre uno de mis libros favoritos de mi adolescencia. Al leerlo quedé enamorada de él, de su simpleza y del personaje principal, Charlie. Como bien leemos en la sinopsis, es un chico de quince años que tiene una visión del mundo muy reducida. En su vida están él, sus pensamientos y su familia. La muerte reciente de su mejor amigo lo llevaron a aislarse incluso más, y a ser centro de burlas en su escuela. 

Charlie empieza su año escolar asustado, al menos eso es lo que nos deja ver al principio, en su primera carta. No sabemos a quién le escribe, pero uno puede leerlo como si las cartas estuviesen dirigido a uno como lector (sé que la mayoría lo tomó así, pero al momento de leerlo a mí me daba la sensación de que le escribía a otro personaje), por estas cartas uno comienza a conocer la manera en que Charlie se comporta y piensa. Para ser tan joven tiene reflexiones un tanto complejas, pero que aún así no dejan de ser reflexiones de un adolescente.

A medida que se va desenvolviendo en su nuevo ambiente, empieza a conocer a quienes lo rodean, habla mucho de su hermana y hermano mayor, y de lo mucho que siente por la vida. No me extraña que este libro me gustara tanto, porque en sus palabras sencillas yo podía relacionarme con como él se sentía. Llegan a su vida Sam y Patrick, en ellos quiero enfocarme un poco más. Patrick es este chico divertido y extrovertido que hace de la vida todo más pasajero. Y personalmente es uno de los personajes que más me atraían. Patrick lograba hacer que esconder un pequeño secreto se viera como la mejor aventura que podría llegar a tener en su vida, y el simple hecho de ser hermanastro de Sam, para mí sólo hacía mejorar la experiencia de lectura, porque sentía que Charlie por fin había encontrado su pequeño lugar en el mundo. Sam no es alguien que sea particularmente de mi agrado, no sé bien si es porque me dejé llevar por los comentarios de terceros que aparecen en la historia, o si es porque no me transmitía una buena vibra ella en sí, pero no me gustaba lo muy apegado que Charlie estaba por ella... Pero también es cierto que Charlie transmite una especie de desesperación, porque es ingenuo y a mí me nacía una sincera necesidad de protegerlo como si fuese un niño, por consiguiente no me terminaba de gustar el personaje de ella. 

Por supuesto, surgen problemas a medida que este personaje va integrándose en un mundo de interacciones  humanas, ser alguien social para un introvertido es prácticamente como vestirse en una segunda piel, y eso es lo que me había gustado mucho al leerlo. Personalmente adopté este libro como uno de mis favoritos cuando lo leí en mi adolescencia, y si bien ahora puedo decir que eso cambió mucho en los últimos años, todavía conservo ese agridulce recuerdo de querer mucho a estos personajes y a esta historia en particular. Es muy difícil encontrar las palabras para expresar todo lo que uno siente por esas cosas que a uno le  gustan mucho, pero eso mismo quiero expresar: es un libro que me gustó muchísimo! Y si bien no es un "necesario", es una buena opción de lectura.

Es bueno estar de vuelta, esperamos que les guste el nuevo look del blog, y ahora es su turno de dejarme saber ¿leyeron este libro? ¿Les gustó? ¡Cuéntenme todo en los comentarios! 
¡Nos leemos!