Reseña: El señor de los anillos II. Las dos torres

¡Hola a todos! Este domingo toca reseña, y qué mejor que la segunda parte de El señor de los anillos: Las dos torres.

Título: El señor de los anillos II. 

Las dos torres

Autor: J.J.R. Tolkien 

Editorial: Minotauro

Año: 1954

Páginas: 476

ISBN: 978-950-547-182-9

Sinopsis 

La Compañía se ha disuelto y sus integrantes emprenden caminos separados. Frodo y Sam continúan solos su viaje a lo largo del gran río Anduin, perseguidos por la sombra misteriosa de un ser extraño que también ambiciona la posesión del Anillo. Mientras los hobbits deben enfrentarse al horror y tomar graves decisiones a las puertas del País Oscuro, hombres, elfos y enanos se preparan para la batalla final con las fuerzas del Señor del Mal. 

Opinión

Hace varias semanas que les traje ya la reseña de la primera parte de El señor de los anillos. Tardé un poco en ponerme a leer Las dos torres, pero finalmente me puse con eso. Tuve que dejarlo un tiempo en reposo por culpa de la universidad, pero por fin pude sentarme y terminarlo. Disfruté tanto de este libro al igual que del primero. Es difícil encontrar qué decir que no sea repetir lo que dije en la anterior reseña, así que voy a enfocarme un poco más en la historia. Creo que Tolkien en esta continuación logró seguir con una impecable historia. El libro está dividido en dos partes, libro tercero y libro cuarto. En la primera parte sigue la continuación donde muestra la disolución definitiva de la Comunidad, se separan y cada uno toma su camino. Frodo, seguido siempre de su fiel compañero Sam, se propone terminar lo antes posible con todo ese tormento y se dirigen solos hacia Mordor. Mientras, los compañeros que quedan, Aragorn, Legolas y Gimli continúan su camino luego de la pérdida de Boromir. Parten tras los orcos que se llevaron cautivos a los otros dos medianos: Merry y Pippin. Entonces en esto se desarrolla esta primera parte, describe el camino que estos tres compañeros hacen persiguiendo a los orcos que se mueven a gran velocidad prácticamente sin descanso. No logran alcanzarlos, sino que los jinetes de Rohan lo hacen primero, y los matan a todos. Es obvio que a

estas alturas ya están grandes reinos luchando contra las fuerzas malignas de Sauron y también, contra la dura traición de Saruman. No son solo los hombres, elfos o enanos quienes se preparan para una dura batalla, sino que los Ents, estas maravillosas criaturas que nos recuerdan lo muy vivos que los árboles están, también se integran a esta batalla y vencen a Saruman en un golpe de furia. Destruyen Isengard al mismo tiempo que una batalla contra los orcos de Saruman se libra en el Abismo de Helm. Es una batalla ganada por el momento, pero la guerra contra el Señor Oscuro no terminó todavía, puesto que él está empecinado en encontrar el Anillo. 

La segunda parte cuenta el camino que siguen Frodo y Sam intentando llegar a Mordor, utilizando a Gollum como su guía. Un guía bastante traicionero, como se puede observar más adelante. Gollum parece estar en constante conflicto con sus dos personalidades, Sméagol en un momento decide ser bueno con Frodo y jura por el Tesoro guiarlo y serle fiel hasta que Frodo decida liberarlo. Pero Gollum sabe que están llevándole el anillo directamente a Sauron y él no puede permitir eso, puesto que lo quiere solo para él. Gollum guía a los hobbits a través de Las ciénagas de los muertos, un paisaje horripilante y rodeado de muerte. La idea principal de ir a través de estos lugares es la de poder escapar a la vista de los espías del Señor Oscuro, el problema es que ya están por todas partes y como el Ojo nunca descansa y siempre está observando, también se dedica a buscar en los lugares por los que nadie pasaría.
Gollum logra llevarlos hasta la Puerta Negra, entrada a Mordor, la cual claramente está cerrada y es totalmente impenetrable. Es por esto que Gollum los lleva por otro camino, pero comienza a derrapar otra vez en su cabeza y sus personalidades entran en conflicto, hasta que deciden llevarle los hobbits a ella. En medio del camino son encontrados por hombres de Gondor, cuyo líder del grupo es Faramir hijo del senescal del reino y hermano del fallecido Boromir. Al principio los toman como espías de Sauron y tiene cautela al dirigirse a ellos, ambos ven al otro como una amenaza. Faramir se los lleva con él y su grupo luego de luchar contra otros ejércitos que vienen desde muy lejos pasa servir al Señor Oscuro. Allí, ocultos en su fortaleza, les ofrecen una calurosa bienvenida, con comida y un lugar donde dormir, pero Faramir necesita y quiere información, por lo que habla con ellos hasta que a Sam se le escapa lo más importante y Frodo termina por contarle todo a Faramir, más que nada obligado por el descuido de Sam. Al día siguiente los dejan libres y Gollum los lleva al peor de los lugares: el antro de Ella-Laraña. Una criatura enorme, colmada de oscuridad y maldad habita en las tinieblas cerca de Mordor. Y allí son arrastrados los hobbits presos del deseo de Gollum por recuperar el Anillo. Sufren un terrible ataque por parte de Ella-Laraña y Frodo sale lastimado. El pobre de Sam, destruido porque su amigo, su señor, está muerto, se encuentra en la difícil decisión de seguir o quedarse allí a esperar la muerte. Luego de mucho dolor y de mucho pensar, Sam decide tomar el Anillo en intentar terminar con aquella empresa él solo. Sin embargo, toma la decisión de regresar cuando escucha que unos orcos se llevan el cadáver de Frodo y allí descubre que en realidad no estaba muerto.
Es aquí donde Tolkien nos deja el puente a la tercera y última parte de esta historia. Decidí contar en parte el argumento, ya que si solo me detenía en algunos puntos la reseña iba a ser demasiado corta, y yo no deseaba eso. Ahora, en esta segunda parte nos vamos enterando de cosas cada vez más oscuras, por decirlo de alguna manera. El viaje ya se tornó mucho más pesado que una simple aventura, la seguridad de la Tierra Media y la vida de todo aquel ser que la habite se ve terriblemente amenazada. Pero siempre hay esperanza, así como nos deja ver la reaparición de Gandalf convertido en Gandalf el Blanco, aquel que sustituye a Saruman y que es como debería haber sido este último. Esperanza que de a ratos se ve opacada o incluso desvanecida por completo, sin embargo reaparece en diversas ocasiones. Hay lealtad y un intento de unión desesperada en contra de Sauron, todos luchan en su contra, todos desean derrotarlo, pero aun falta que la Tierra Media se una definitivamente para poder eliminarlo del mapa completamente. Claro que es Frodo quien lleva la carga más grande a cuestas, puesto que si él falla todo falla. Es aquí donde se puede observar un alto grado de valentía, Frodo sin Sam probablemente no habría llegado demasiado lejos. A esas alturas quizá nadie habría llegado a Mordor solo y con vida, sobre todo teniendo el Anillo en su poder. La unión de Frodo y Sam inseparables ante tan temible empresa, sabiendo que las probabilidades de fallar son altísimas, los convierte en dos hobbits llenos de valor y una esperanza muerta pero con deseos intensos de revivirla.

He leído hace mucho tiempo (por lo tanto me disculpo si lo que voy a decir está errado) que en estos libros se puede ver un gran desprecio hacia lo que es industrialismo y la incansable tortura hacia la naturaleza. Quizá esto puede apreciarse al ver como Isengard se convierte en una ciudad industrial deshaciéndose de la naturaleza y al mismo tiempo vemos a los árboles tomando venganza y recobrando su poder vengando a sus compañeros muertos y a la vez devolviendo el río a su lugar. Yo no estoy realmente segura de esto, pero si esto es verdad me parece un dato sumamente interesante, porque esta lucha entre maquinas y naturaleza se ve frecuentemente a lo largo del libro. Hay ciertas cosas que también me llamaron la atención sobre los ejércitos servidores de Sauron que vienen desde lejos, puesto que los describen como morenos, traen Olifantes, se cubren el rostro... Parece la descripción de hombres africanos o asiáticos. Según leí una vez Tolkien era un hombre muy inglés y no le gustaban las colonias, y sabemos donde hubieron colonias inglesas, ¿verdad? Creo yo, desde mi muy humilde opinión que estos libros podrían tomarse y analizarse desde cientos de puntos de vistas, como creo haber mencionado en mi reseña anterior.
Todo lo que yo diga es totalmente pobre y carente de herramientas, tan solo doy mi opinión y hablo de lo poco que sé o he leído por ahí. Mi propósito es realmente investigar de a poco lo más que pueda sobre este tema, sacar información de diferentes fuentes y algún día poder traerles una entrada mucho más completa y explicativa, donde quizá mis suposiciones sean ciertas o aclare las que están erradas.

Ahora lo último es calificarlo:

Pero bueno, eso es toda la reseña de hoy. Espero no haberlos aburrido mucho y que sea de su agrado. Es momento de despedirme y espero sus comentarios muy pronto. ¡Nos leemos!